Aviso de entrada: no sé nada de moda ni de estilismo. Es un mundo que siempre me ha quedado lejos. Tanto profesionalmente como de interés propio. Lo máximo que se me ocurre es llegar a combinar el calzado con “la parte de arriba”. Ya veis, zero patatero en moda. Pero me encanta ver cómo jóvenes se aferran a sus motivaciones.
Por esto, aunque lleven tiempo haciendo la gala, este año, tanto el Diari Digital Independent de Sabadell como un servidor, les hemos dado un escaparate online. Ell@s se lo mercen. Los futuros profesionales de la moda: Lorena Cabrera, Laia Castellano, Anna Coromines, Carles Egido, Tania Marcial, Celeste Muñoz, Alba Navarro y Gemma Sitges. Gracias a por acercarme a este humilde pero auténtico y cálido glamour.
El conocimiento sobre las pasarelas y los desfiles se lo lo dejó a ell@s. A las diseñadoras y los diseñadores de la Escuela Illa de Sabadell. Un centro municipal que entre otras disciplinas abarcan las Artes plásticas y el Diseño en Estilismo de Indumentaria.
Pues bien, esta escuela de reconocido prestigio dentro de la enseñanza pública, organizó el pasado viernes la Desfilada Moda-Illa dónde se presentaron los proyectos finales (los vestidos) de los actuales alumnos y futuros profesionales. Se inspiraron en le Alta Costura Barcelona de la 2ª mitad del siglo XX.
El desfile se celebró en la misma ciudad de Sabadell de manera manera offline. Aviso a navegantes: digo esto por que me apasiona el mundo online. Pero, reconozco que de vez en cuando hay que descansar. Hay que moverse. Hay que apartarse de la pantalla del ordenador. Tenemos que acudir a las fiestas, restaurantes, centros comerciales, eventos…¡dónde sea! y desconectar del entorno digital. Tenemos que levantar el culo de la silla aunque lo pongamos en otra para ver un desfile. 
Antes que se produjera el desfile, los 8 diseñadores pusieron a votación popular sus modelos través de empresa de moda online. Los fans votaron a través de Facebook el vestido que más les gustó. El cual sería comercializado por la empresa.
No entraré en ninguna valoración ni desprestigio. Repito que no entiendo de ropa. Pero, lo que me viene como anillo al dedo son las acciones de promoción en las Redes Sociales. No es una desacreditación sino una crítica constructiva. Existe un beneficio a largo plazo en cuanto a reputación online.
Como profesional de la comunicación online y del social media, digo que no es la primera vez que los usuarios y concursantes quedan algo desconcertantes con los concursos. De la misma manera que se pueden comprar fans de manera legal, aunque sea una mala práctica no recomendada por los expertos del social media, también hay irregularidades en concursos al estilo “Me gusta”. Un ejemplo es el caso de Mahou. El cual estalló una crisis online provocada por la incertidumbre en las bases legales y una concursante tratada injustamente.
Sin embargo, no vamos ahogar la fiesta. Dejemos a un lado está mini disputa inofensiva y continuemos con el buen rollo. Pensemos en ellos y ellas: los futuros estilistas y los 8 proyectos que se presentaron. De los vestidos de noche hasta los vestidos nupciales. Pasando por prêt-à-porter hasta danza-teatro.
Una de las propuestas fue la colección “Cloché” de la Diseñadora Alba Navarro: “El nombre proviene de los sombreros que llevaban las mujeres en esa época. Pero, Cloché trata de una colección de nupcias inspirada en la mujer flapper de los años 20, una etapa movida por la exuberancia y euforia”.
“Flapper un estilo de vida que llevaban las mujeres. Era una mujer de aspecto andrógina, con el pelo a lo garçonne, vestido sencillo, no lleva corsé, una actitud independiente, mujer atractiva y trabajadora. Flapper y a quien le encanta el jazz, los clubs nocturnos, los bailes provocativos, fuma y bebe alcohol”.
El desfile transcurrió perfecto. Organizado en 3 claros actos. El tiempo justo y necesario para no hacerse pesado. Un desfile entretenido, familiar y cálido. Consiguió acercarme un poquito más a éste desconocido mundo de la moda. Gracias.
Seguramente será la primera y última vez que pisé una desfilada y/o pasarela. A no ser, que dentro de unos años, alguien de éstos 8 jóvenes estilistas tenga su propia firma y acabe inventándome a alguno de sus eventos más mediático. No podré rechazarlo.
Lo que si sé, aunque suene a tópico, es momento de dejar paso a los jóvenes. Tenéis que empujarlos y empujarnos. Ahora más que nunca, tenéis que apoyarlos en sus ideas, sus proyectos y, sus ilusiones.
Carles Gili 2013
Vuelve arriba
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